Claude Monet no solo fue otro gran pintor impresionista, sino que fue un gran retratista de la naturaleza. En sus comienzos, trataba de captar la luz y la atmosfera de manera marcada y suelta, mientras que en sus últimos años, estaba más interesado en el uso decorativo del color y las formas. Y al pintar al aire libre, Monet logró retratar todo tipo de escenas en las grandes ciudades, en el campo, en el río y mar, o hasta incluso en su propio jardín, siendo una influencia para todos los artistas desde el postimpresionismo hasta el arte abstracto.
Claude Monet nacío en 1840, en la ciudad de Le Havre. Durante su infancia, se dedico a hacer caricaturas y a los 20 años se mudo a París a estudiar en la Academia de Charles Suisse.
Ahí conocío a varios artistas que juntos formarían el Impresionismo, sobre todo después de haber sido rechazado por el Salón. El grupo se inspiró en artistas como Turner, Manet, Delacroix, entre otros, y en sus obras había tanto un deseo de capturar de la sociedad y la naturaleza de su época.
Luego de 10 exposiciones, el grupo se separo y Monet se dedico a realizar series de pinturas sobre temas como almiares, alamos, vistas del mar o ciudades como Londres y Venecia y la Catedral de Rouen, así como a su propio jardín con su puente japones, flores, y sus famosos nenufares. Luego de tener problemas con su vista, fue operado y continúo pintando hasta su muerte en 1926.
Música: “Une barque sur l’ocean” de Maurice Ravel
Grandes Artistas: Claude Monet